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Aquel 1 de mayo del 2013 ya es una fecha especial para nuestros protagonistas. “No hay mejor día para empezar un proyecto” comenta Luis Vericat, uno de los socios de Avego Abogados, boutique legal especializada en mercantil, tmt y procesal, ya cercana a los seis meses de vida. En este periodo de tiempo tanto Luis Vericat, como Sylvia Alonso y Marta Gómez-Luengo, han logrado dar el paso de asalariados a empresarios sin excesivos problemas:” Lo principal el tomar decisiones que antes tomaban por ti. Ahora hacemos cosas que antes no habíamos hecho nunca” explica Gómez-Luengo, mientras que Alonso subraya que “Es posible que el paso natural de un abogado sea convertirse en su propio empresario. Hasta la fechano he sentido más responsabilidad o agobio que cuando trabajaba por cuenta ajena.” aclara. Estos tres letrados con un notable currículum profesional a sus espaldas y experiencia en grandes firmas revelan que “la vida hace que te juntes con personas con valores parecidos. Así ha pasado en nuestro caso. Sino tienes buenos compañeros de viaje tu proyecto está condenado al fracaso y es que las relaciones personales son muy complicadas” comentan casi al unísono. “Estos primero cinco meses como empresarios son muy positivos. Creo que en una madurez profesional como la nuestra, dar este paso era lo que nos faltaba. Desde fuera, da la sensación que tienes que atar muchas cosas, pero arrancar tu propio despacho es más sencillo. Para iniciar un proyecto necesitas, valentía, ilusión, proyecto profesional y tener gente, clientes que confíen en ti. De momento las expectativas se han cumplido con creces. Hemos crecido mucho más de lo que pensábamos crecer. Las primeras expectativas fueron prudentes pero las hemos superado. Hemos advertido que había mucha gente que confiaba en nosotros. Clientes que ya nos conocían y con los que hemos trabajado y otros que al saber de la existencia de la firma apostaron por nosotros. El balace es bueno, solo son cinco meses pero estamos satisfechos.“Luis Vericat, socio director de Avego. “El balance es de absoluta felicidad. Nos hemos juntado tres profesionales como socios de este despacho que tiene la misma visión de la abogacía como profesión. Hemos podido poner en práctica algo en lo que los tres creemos realmente. Somos bastante flexibles y absolutamente dedicados al cliente en nuestra forma de trabajar. Esto lo dicen muchos despachos pero realmente poco lo cumplen. Avego es eso, nace con esa filosofía de dedicarse de forma total al cliente. Poder mimar al cliente sin estar pendiente de la minutación y de las tarifas es una satisfacción muy importante. En el fondo, hay que darse cuenta que estamos dando un servicio de calidad. Y así entendemos la profesión de la abogacía.” Sylvia Alonso, socia directora de Avego. Por mi parte, añadiría que otro valor importante que tiene que ver con los clientes es la cercanía. Es muy importante que nos vean de igual a igual. Hay que romper ya con la idea que el abogado es un ser superior que habla al cliente en otro lenguaje. Creo que los tres socios de Avego somos bastante cercanos y coloquiales. Queremos satisfacer las necesidades de nuestros clientes con mucha calidad. Nos importa casi que nos vean como un amigo, en definitiva. Hay tanta confianza que nuestros clientes nos preguntan cuestiones que a veces no tienen nada que ver con lo que les estamos confiando. Pero como hay confianza plena les ayudamos en ese y otras cuestiones. Con esta cercanía que genera la confianza es posible que al final nos perciban como un partner de su negocio. No creo que sea malo que junto con una relación profesional haya otra de cierta amistad.” Marta Gómez Luengo, socia directora de Avego Abogados. ¿Qué ha sido lo más complicado para ustedes a la hora de pasar de asalariados a directores de su proyecto empresarial? Marta Gómez-Luengo: Lo principal el tomar decisiones que antes tomaban por ti. Ahora hacemos cosas que antes no habíamos hecho nunca. Luis Vericat: Es cierto, ahora nos tenemos que ocupar de todo.. de la compra de folios, de lidiar con los problemas informáticos. Ahora te das cuenta que tienes que dedicar también tiempo a estas cuestiones. Sylvia Alonso: Es posible que el paso natural de un abogado sea convertirse en su propio empresario. Hasta ese 1 de mayo del que hablaba Luis, éramos asalariados. La verdad es que hasta la fecha no he sentido más responsabilidad o agobio que cuando trabajaba por cuenta ajena. Te das cuenta que tienes que hacer números y proyecciones de forma continuada para asegurar la pervivencia del negocio. ¿Cómo han organizado el trabajo directivo del despacho? Luis Vericat: Era lo mejor que podíamos hacer. A nivel profesional Sylvia es la responsable del área TMT y regulatorio y también se encarga de todo lo que tiene que ver con administración y facturación. Por su parte Marta, socia del área mercantil y operaciones, está centrada en la constitución del despacho y su régimen interno. Y, por último, un servidor, procesalista como letrado, me centro en el marketing y la comunicación para dar a conocer la firma en el propio sector legal en el que se desenvuelve. Sylvia Alonso: Hacemos los tres labor comercial y creo que hemos hecho bien en organizar el trabajo de esta forma. Nuestra idea no es crecer demasiado si hacerlo de forma progresiva. Ahora es el momento de poner el sello personal al proyecto. Hemos suprimido las divisiones de facturación por áreas. Procuramos dar todos los que estamos aquí lo mejor para que el despacho sea un éxito. Rompemos así el esquema del despacho tradicional y creemos que esta forma de trabajar diferentes se adecúa mejor a nuestro proyecto empresarial. Marta Gómez-Luengo: Nos importa sobre todo la facturación global de la firma. Y la comunicación entre las tres áreas de negocio es muy fluida. No son compartimentos estancos sino que procuramos ayudarnos para facturar más. Además tenemos ya un equipo de cuatro letrados que trabajan con nosotros. Eso nos hace ser más responsables aún en nuestra forma de trabajar. Queremos que se labren un futuro y que tengan una retribución de acuerdo con su valía. También han apostado por el proyecto nuestro y hay que responderles de la mejor forma posible. ¿Comparten la idea de otros colegas, también emprendedores que la gestión del despacho y la búsqueda de clientes son las partes más complejas de un proyecto propio? Luis Vericat: El punto clave es que nos llevemos bien los socios del despacho. Esta cuestión ha hecho que otras firmas fracasasen. Los abogados somos muy especiales en el trato y no es sencillo trabajar con nosotros. SI en eso aciertas, todo lo demás viene después de forma progresiva. Aspectos como la comunicación de la firma; la gestión o la comercialización son cuestiones fundamentales. Pero por encima de todo está confiar en tus socios y ser solidarios con ellos. Sylvia Alonso: Al final la vida hace que te juntes con personas con valores parecidos. Así ha pasado en nuestro caso. Si no tienes buenos compañeros de viaje tu proyecto está condenado al fracaso. Hay que darse cuenta que las relaciones personales son muy complicadas. En el terreno laboral, la dificultad es mayor. Buscas profesionales con la misma visión de negocio además de que sean buenos técnicamente como letrados. En nuestro caso, haber trabajado antes en un despacho en expansión, nos sirvió para tomar la decisión de trabajar juntos con posterioridad. Marta Gómez-Luengo: Lo vemos en los medios de comunicación cuando las noticias hablan de despachos que se separan tras meses de fusión. Aquí lo que subyace es que no se comparten los mismos valores éticos o la propia filosofía empresarial. Todos los que configuramos Avego Abogados hemos trabajado en despachos grandes y sabemos que hay un lema equivocado: Yo facturo más por lo que mando más. Eso genera problemas internos importantes. Hay que trabajar desde el consenso y en el futuro la gente que se incorpore al despacho deberá tener nuestra propia filosofía empresarial. ¿Qué les diría a aquellos profesionales que están leyendo esta entrevista y que tienen en la cabeza ser empresarios en el futuro? Sylvia Alonso: Sobre todo animarles a que pongan en marcha su proyecto empresarial. Es menos complejo de lo que uno piensa y realmente, como estamos comentando, el dinero no es lo más importante del mismo. Si tienes ganas, ilusión, capacidad, buenas relaciones que se materializan en buenos clientes la puesta en marcha de un proyecto personal jurídico es muy viable. Hay que eliminar que la seguridad de una nómina a fin de mes es una garantía. En un mundo como el que vivimos hay que eliminar esa premisa. Luis Vericat: Coincido con Sylvia en su planteamiento. Si tienes todos esos elementos al final tienes resultados tangibles. Hay que darse cuenta que la necesidad hace desarrollar un instinto de supervivencia y empresarial importante. Dar ese paso y ser empresario supone sacar lo mejor de ti que incluso hasta ese momento no lo habías hecho. Hay muchos abogados que en grandes estructuras están al 40 por cien de sus posibilidades. Tienen que darse cuenta que cuando se lancen llegarán al 100 por cien de lo que pueden dar. Marta Gómez-Luengo: Realmente no te das cuenta del potencial que tienes como persona y como abogado. Hasta que uno no se lanza a la aventura empresarial no sabe realmente su potencial como profesional. En un momento de crisis como éste es ideal para afrontar este tipo de proyectos. Hay que darse cuenta que las empresas tienen menos recursos que sacar fuera a nivel de asesoramiento legal. Lo que quieren sobre todo es al profesional que les soluciona el conflicto, es más económico y conoce su realidad frente a la gran estructura. Realmente, ¿cuál es la forma de ver el negocio de Avego Abogados? Sylvia Alonso: Se trata de dar soluciones prácticas al cliente. Ya no quiere tesis doctorales sino respuestas breves y fundamentadas. Y también quieren que entiendas lo que hacen y que conozcas el sector en el que se desenvuelven. En un sector como el mío, de Telecomunicaciones, es muy intervencionista y muchas veces limita la actividad comercial. Nuestro trabajo trata de eso de cómo te adaptas a este entorno. Marta Gómez-Luengo: Otro elemento que valoran mucho es poder tratar con los socios directores de forma fluida y habitual. Esta cuestión en otros bufetes no se cuida y los clientes acaban siendo asesorados por gente muy joven sin experiencia legal. También es clave la capacidad de respuesta rápida y que pueda llamarte en cualquier momento. Luis Vericat: Se trata, como ya hablamos antes de ser próximo. Ser honesto es fundamental y eso se aprecia en el trato diario que tienes con ellos. En la medida de lo posible desarrollamos relaciones personales con muchos de nuestros clientes. Es fundamental que se cimente la confianza a nivel profesional y que luego pueda tener otro plano personal. ¿Cuál va a ser la expansión de Avego Abogados en los próximos años? Luis Vericat: Hay que organizar todo de forma prudente y razonada. La ambición debe ser controlada para no morir de éxito como otras firmas. Empezamos de forma modesta con el control de gasto e iremos creciendo en función de las necesidades de los clientes. Lo que nace grande puede convertirse en monstruoso o morir en seguida. Los proyectos deben ser sólidos e ir creciendo de forma progresiva. Es fundamental tener los pies sobre la tierra y ser humilde en estos planteamientos. Que trabajemos los tres en un mismo despacho no es casualidad. Así compartimos muchas cosas y el diálogo fluye. Sylvia Alonso: Con esta forma de trabajar los tres socios sabemos la problemática de la firma y el diálogo es continuado. La inversión que hemos hecho en el proyecto ha sido mínima al contar ya con clientes que querían trabajar con nosotros. El principal capital de un proyecto son los abogados que lo componen. En el futuro queremos ser un despacho de referencia sin crecer de forma excesiva. Es bastante posible que incorporemos a medio plazo área fiscal y laboral, servicios ahora que ya nos piden algunos de nuestros clientes. No nos gustaría ser más de veinte profesionales. Con las tecnologías existentes podemos asesorar a clientes de toda España sin necesidad por el momento de abrir otras oficinas diferentes a las que tenemos ahora. Marta Gómez-Luengo: Creo que la gestión de una firma como la nuestra es más sencilla. Confiemos que no se complique cuando sigamos creciendo. El crecimiento tiene que ser natural a medida que los ingresos lo permitan. Eso se llama sostenibilidad económica, factor muy a tener en cuenta. Es fundamental no impacientarse en negocios como éste. Ahora lo fundamental es que la firma se consolide a corto y medio plazo. Creceremos de forma segura. Es clave que los nuevos letrados que se incorporen al proyecto de Avego Abogados tengan nuestra misma filosofía empresarial. Se trata sobre todo que no rompan el equilibrio que tenemos ahora. Es posible que algunos de nuestros colaboradores en laboral y fiscal se incorporen con nosotros como decía Luis pero hay que hacerlo con calma y su valorando su forma de ser y capacidad profesional como juristas.
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