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“La metodología española con la conferencia magistral en la enseñanza del Derecho crea mentes muy sistemáticas; en estos momentos con los cambios que vienen auspiciados desde Bolonia y con la futura Ley de Acceso a la Abogacía en nuestro país podemos ir un poco más allá” es una de las reflexiones que Soledad Atienza, directora del Grado en Derecho de IE Law School realiza a este periodista durante esta entrevista. La publicación de su tesis doctoral por Thomson Reuters Aranzadi con el patrocinio de Pérez Llorca, nos sirve para hablar del estado actual del modelo docente de nuestra abogacía. “La combinación del método socrático y la experiencia en clínicas legales son dos elementos claves en la formación del futuro abogado. Ya son parámetros muy conocidos en EEUU, donde realmente la práctica de su abogacía es muy parecida a la española”, señala. En un contexto como el actual, se perfila un abogado global que pueda trabajar en cualquier jurisdicción por su dominio del inglés y de muchas habilidades directivas, además de su excelente manejo del derecho como experto. En primera persona “Estudié Derecho en el CEU San Pablo. Al término de esta licenciatura realicé un Master en Derecho Europeo en Alemania en la Universidad de Saarland. A mi vuelta como abogada estuve ejerciendo durante cinco años como abogada en el despacho Pérez Llorca. Sin embargo quería dar un cambio profesional a mi carrera. Realicé un Executive MBA en el Instituto de Empresa, eso me abrió las puertas a su finalización de esta propia entidad académica en los Programas Master de Asesoría Jurídica de la Escuela de Derecho. No es sencilo en este sector hacer este tipo de cambios profesionales. En mi caso se trato de profundizar en la materia y realizar la tesis doctoral, ahora convertida en libro. “Enseñar Derecho: ¿Puede servirnos la experiencia de Estados Unidos”, un proyecto editado por Thomson Reuters Aranzadi y patrocinado por Pérez Llorca. En nuestro país, la mayor parte de las oportunidades profesionales se encuentran dentro de un mismo sector. Cambiar de una actividad a otra es más complicado que en otros países de nuestro entorno. Con el tiempo pase a encargarme del Grado en Derecho del que también soy profesora. Además soy co-presidenta del Comité Académico y de Desarrollo Profesional de la IBA (Internacional Bar Association). Es evidente que la formación académica en Derecho con el paso del tiempo ha ido evolucionando. Pero debe progresar más. Es evidente que hay un nuevo marco jurídico de acceso a la abogacía y el llamado Espacio Europeo de Bolonia, ellos imponen cambios a la hora de enseñar Derecho en las Facultades españolas.” Sra Atienza ¿El mejor profesor para un futuro abogado es aquel profesional que compagina la enseñanza con la práctica del Derecho a diario? Se ha hablado mucho de este tema Lo ideal es el equilibrio. Creo que es valioso que los alumnos tengan diferentes alumnos de profesor. Definir cuál es el perfil del mejor profesor es complicado. Se trataría que tuviera una experiencia académica y profesional notable. Por un lado la solidez académica y por otro el toque de realidad del trabajo diario. Desde su posición privilegiada en el mundo docente ¿Era realmente necesario un cambio como el que plantea Justicia sobre el acceso a la abogacía? Hay que ver esta medida desde un punto de vista positivo. El cambio nos acerca a otros países europeos donde sí esta regulada esta práctica. En cada país se organiza de una forma, bien como programa máster o prueba de acceso. Hay que aprovechar la oportunidad que nos brinda la nueva Ley de Acceso a la Abogacía para mejorar nuestro sistema de enseñanza. Se podrá diseñar programas nuevos para formar al futuro abogado. Confío que las Facultades de Derecho que preparan estos masters de Acceso a la Abogacía lo hagan siguiendo las tendencias más innovadoras que hay en Europa y en particular las de EEUU sobre formación de abogados. Así se formarán a los abogados en las necesidades del mercado jurídico actual. ¿Cómo surge escribir “Enseñar Derecho: ¿Puede servirnos la experiencia de EEUU, en su trayectoria profesional”? El libro es el trabajo de mi tesis doctoral y sirve para aunar mis intereses académicos y profesionales. Compara los métodos de enseñanza en Derecho en EEUU y España, a la vez dos sistemas jurídicos diferentes, el primero Common law y el segundo Civil Law. En la obra constanto que hay un acercamiento de ambos sistemas jurídicos. Y que ese acercamiento se puede producir en el ámbito académico y en los ámbitos de formación de ambos sistemas legales. ¿Qué aspectos se podrían implantar sin demasiados traumas en el modelo educativo español? En EEUU el método tradicional de enseñanza es el llamado del caso o socrático. Se estudian sentencias judiciales y creo que podría adaptarse sin traumas a nuestro modelo educativo. Este es un método activo. Utilizable en una enseñanza donde se busca la participación de los alumnos. Quizás aquí se podría combinar el uso de esas sentencias judiciales con el estudio de la legislación y jurisprudencia. Por otro lado, se podría utilizar sin que fuera el método único en nuestra enseñanza. Si vamos a formar abogados, este método es uno de ellos que se debe tener en cuenta. No debe ser el único. Cambio formativo implicaría cambio en la mentalidad de los formadores. Es lógico que sea así. Es tan importante el contenido como el método educativo que se emplea para esa enseñanza. Los profesores además de dominar el contenido que vayan a enseñar deben de conocer muy bien la metodología que emplean. Hay que reconocer que en España no hay mucha práctica con esta metodología. Pero se puede aprender sin complicaciones. El método socrático se puede adaptar a la formación de abogados en España. Se puede desarrollar tanto en el Grado en Derecho como en el Master. Probablemente en diferente medida. En el propio Grado sería algo más limitado y de una forma más amplia en el citado Master de Acceso a la Abogacía. Con esta nueva metodología, qué duda cabe que la participación del alumno es más palpable. Tienen que prepararse las clases y luego tener más presencia activa en los debates que genere la exposición del profesor. Se trata de analizar textos jurídicos desde el punto de vista crítico frente al aprendizaje memorístico tradicional. Otro de los elementos formativos que ya se importa desde EEUU a España son las clínicas legales. Son instituciones de marcado carácter social. Nuestra entidad gestiona la suya propia. Combina el poder ofrecer esos recursos jurídicos a entidades que carecen de medios y a la vez sirve de expertise a los jóvenes abogados, muchos de los cuales tienen su primer contacto con el mundo legal en este tipo de situaciones. Esta herramienta de enseñanza que tiene gran tradición en EEUU creo que en el futuro podrá desarrollarse con mayor profusión en nuestro país. En la nuestra trabajamos con diferentes ONGs y fundaciones, algunas de ellas a nivel nacional y otras en el plano internacional. Nuestros estudiantes siempre tienen a su lado otros abogados de mayor experiencia que les orientan en esta actividad profesional. Hay otro tipo de proyectos de corte investigación que también hacemos en colaboración con estas instituciones, sobre todo sobre armonización de políticas europeas e internacionales; corporate gobernance o incluso temas medioambientales. En el caso del IE, como institución académica, ¿Cómo ha ido evolucionando su modelo formativo en estos años? La evolución ha ido progresiva. En el Master de Derecho que impartimos en la Facultad Derecho seguimos el método del caso o socrático, del que venimos hablando. Se emplea desde el principio al final del programa. Ese sistema no es viable en un Grado en Derecho. Aquí lo que hacemos es impulsar un método de enseñanza activo y participativo a lo largo de todo el programa. En alguna ocasión se utiliza el método del caso, pero no siempre. También utilizamos la clínica legal o podemos llevar a cabo simulaciones de juicios o reuniones con clientes. Se trabajan las negociaciones y se busca que el alumno sepa trabajar en equipo. Son métodos de enseñanza activos y participativos. En este contexto han surgido los Moots competiciones en las que universidades compiten en el ramo del Derecho o Arbitraje con casos reales… Son grandes herramientas y ayudan mucho al modelo de enseñanza activo del que estamos hablando en esta conversación. Es muy adecuado para el modelo de programa del IE, orientado a la práctica profesional de la abogacía en un entorno global e internacional. El Moot permite a los alumnos que trabajen en equipo y tomen decisiones. Además de estudiar deben de llegar a conclusiones. Luego esta la parte en la que intercambian conocimientos con otros profesores y alumnos de otras nacionalidades y sistema jurídicos diferentes. El nuevo concepto de abogado, más global y con habilidades no jurídicas necesarias ¿Cómo se plasma en estos programas formativos en Derecho? Es la combinación de una formación jurídica excelente y muy sólida, complementada con otra en administración de empresas y gestión empresarial. En esta parte hay que conocer muy bien las habilidades de dirección y gestión. En nuestro caso tenemos una asignatura que se imparte en todo el programa de Grado en Derecho que es la de Abogacía. En ella los alumnos ven a lo largo de los cuatro años áreas fundamentales como habilidades centradas en el sector jurídico, cuestiones de ética profesional y temas relacionados con la gestión de los despachos de abogados. ¿Siguen siendo las habilidades no jurídicas, el talón de Aquiles del futuro abogado? Está cambiando esta tendencia por fortuna. Es un requisito imprescindible para cualquier profesional y en particular para los abogados. A este respecto nosotros intentamos formarles en estas materias desde el inicio en este Grado en Derecho. Las habilidades las enseñamos desde el principio. Deben ir unidas al conocimiento sistemático del ordenamiento jurídico. Nuestro Grado en Derecho es generalista, les damos las herramientas para que luego profundicen en el propio sistema jurídico. Luego a lo largo de su carrera se especializarán en determinadas jurisdicciones. Es imposible enseñar todas las materias nuevas que surgen Este Programa de Grado permite una especialización, a través de Diplomas, así hay uno en Derecho Europeo; otro en Administración de Empresas; Relaciones Internacionales y un último en Derecho de los Negocios Desde su punto de vista ¿Qué debe hacerse para mejorar la relación entre las Universidades y los despachos de abogados? Tiene que ser una relación más estrecha. Así queda claro en el Espacio Europeo de Bolonia y en la propia Ley de Acceso a la Abogacía Española. Se debe profundizar aún más en este Lo que entendimiento que ahora empieza a emerger. No podemos olvidar que con los nuevos cambios formativos los estudiantes deben tras el master, realizar un periodo de prácticas en cualquier despacho profesional antes de poder colegiarse y ejercer como abogado. Necesitamos que seas prácticas las organicen de forma conjunta las instituciones académicas y las profesionales. Al final serán los despachos quienes se aprovechen de esos conocimientos de estos futuros abogados. En estas prácticas surge como figura importante la del tutor, abogado con más experiencia que gestiona al joven letrado.. Es fundamental su papel. Son prácticas formativas de las que estamos hablando. Forman parte del programa de acceso a la abogacía, luego vendrá más adelante su papel de becario en esta u otra firma legal. Las prácticas deben generar una enseñanza además de una experiencia. En este escenario es importante un tutor o un profesor que vaya guiando el trabajo del alumno, de cara a que pueda aprovechar de forma notable la enseñanza de esas prácticas. Y en el caso del IE Law School, ¿cómo están organizadas estas prácticas? Forman parte del Programa de Grado en Derecho. Se pueden lograr a través de becas que ayudan a realizar esas prácticas profesionales. Así hay acuerdos con Clifford Chance, Lathan & Watkins; PWC, Uría Menéndez, Cuatrecasas, Goncalves & Pereira y Pérez LLorca. Con este despacho impulsamos una Cátedra de Derecho Mercantil de forma conjunta. Nuestro programa de Grado lleva tres años. Aún no tenemos alumnos graduados, por tanto. Creemos que las prácticas ofrecen la posibilidad de conocer lo que es el mundo legal y al propio bufete la selección de sus estudiantes y conocer cuál es el perfil del estudiante en Derecho que rige en la actualidad. ¿Qué consejo le daría a este joven letrado que lea esta entrevista? ¿Cómo debe enfocar su futuro profesional a corto plazo? Con una buena formación universitaria y de postgrado, empezar a trabajar en un despacho de abogados es la siguiente etapa de la formación. Crear tu propia firma legal y trabajar de forma independiente debe ser un paso que se pueda dar en unos años con posterioridad. Es complicado hacerlo en los inicios de una carrera profesional. Lo que sí es imprescindible es poder trabajar en ingles si quieres ejercer la abogacía en España en un despacho solvente Y si ese abogado joven cruza el charco y llega a EEUU ¿Con qué se va a encontrar? Para ejercer en EEUU te tienes que colegiar lo primero. Un graduado en España debería hacer un Master, programa que ofrece una formación de derecho americano, a la vez que tradicional y prestigioso. Este es un programa valorado de forma notable en Europa y en nuestro país. Respecto a las diferencias entre las firmas legales americanas y españolas se van acortando. Cada vez se asemejan más. Los despachos españoles y europeos siguen las tendencias que se siguen en EEUU. De hecho los modelos de captación de talento, de retención del mismo o de facturación han seguido estos parámetros norteamericanos. En un mundo global, ejercer en diferentes jurisdicciones parece normal y deberemos habituarnos a ello.
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