Periodistas
y
fiscales
debatieron
hace
unos
días
en
la
madrileña
Casa
de
América
sobre
cuál
debe
ser
la
relación
entre
el
Ministerio
Fiscal
y
los
medios
de
comunicación.
Este
programa
formativo
organizado
por
la
Asociación
de
Fiscales
y
patrocinado
por
Santander
Justicia
estuvo
dirigido
para
todos
los
fiscales
de
Madrid,
así
como
de
las
Fiscalías
especiales
y de
los
órganos
centrales.
Clausurado
por
la
FGE,
Consuelo
Madrigal
pudimos
conversar
con
Emilio
Frías,
uno
de
los
organizadores
de
este
encuentro
y
habitual
contacto
de
los
periodistas
que
trabajamos
en
el
mundo
jurídico
de
cara
a su
propia
entidad.
Desde
su
punto
de
vista
hay
aún
una
falta
de
conocimiento
del
papel
que
hace
el
fiscal
por
parte
de
nuestra
sociedad
:” No, desgraciadamente
la
sociedad
desconoce
qué
hacemos,
los
motivos
que
nos
llevan
a
ello
y
las
funciones
que
tenemos
encomendadas.
Todos
somos
responsables
en
esa
falta
de
información”,
comenta.
También
se
muestra
partidario,
como
otros
compañeros
suyos
de
desarrollar
una
red
de
gabinetes
de
prensa,
similares
a
los
que
tiene
el
CGPJ
en
todos
los
TSJ,
a
nivel
de
fiscalías,
cuestión
que
sabemos
que
interesa
mucho
a la
carrera
fiscal.
En
la
foto,
Emilio
(en
el
centro)
,
moderando
la
mesa
en
la
que
diferentes
periodistas
hablaron
de
su
relación
con
el
Ministerio
fiscal.
LuisjaSánchez/Lawyerpress
Nuestro
interlocutor
ingresa
en
la
carrera
fiscal
en
el
año
2004.
Su
primer
destino
es
el
Prat
de
Llobregat,
fiscalía
de
Barcelona.
De
ahí
pasó
a
Alicante
y
más
tarde
a
Albacete
donde
ahí
sigue
llevando
cooperación
internacional
y
siniestrabilidad
laboral.
En
la
Ejecutiva
de
la
AF
(Asociación
de
Fiscales)
se
encuentra
desde
el
2009,
obteniendo
luego
el
apoyo
en
los
Congresos
del
2011
y
2013.
Desde
hace
un
año
es
el
portavoz
para
los
medios
de
comunicación
de
esta
asociación
profesional.
Reconoce
que
el
balance
este
año
de
trabajo
es
positivo.
Valora
mucho
el
trato
con
los
medios
de
comunicación
por
ser
profesionales
diferentes
a
los
que
habitualmente
se
encuentra
en
su
lugar
de
trabajo.
Este
trato
estrecho
le
ha
valido
para
tener
una
visión
de
conjunto
de
lo
que
es
la
información
La
Asociación
de
Fiscales,
mayoritaria
en
el
Consejo
Fiscal,
órgano
de
gestión
del
Ministerio
Fiscal,
nace
el
año
1980
como
asociación
profesional
ajena
a
cualquier
adscripción
política
al
amparo
del
art.
127
de
la
Constitución
Española
de
1978
y se
apoya
en
el
art.
54
del
Estatuto
Orgánico
del
Ministerio
Fiscal
de
1981,
estando
integrada
en
exclusiva
por
miembros
en
activo
de
la
Carrera
Fiscal.
A su
vez,
junto
con
la
Asociación
Profesional
de
la
Magistratura
y el
Colegio
Nacional
de
Secretarios,
integra
la
Confederación
de
Asociaciones
Profesionales
de
la
Justicia.
Sr.
Frías,
después
de
estar
una
jornada
casi
entera
con
periodistas,
¿qué
valoración
hace
de
su
trabajo
de
estos
profesionales
y de
la
relación
que
los
fiscales
mantienen
con
ellos?
El
trabajo
que
hacen
los
periodistas
de
tribunales
es
ejemplar,
son
ellos
quienes
permiten
que
la
sociedad
pueda
estar
informada
de
esta
clase
de
noticias.
Desgraciadamente
la
relación
de
las
fiscalías
con
los
medios
es
escasa
y de
desconfianza
motivada
por
el
desconocimiento.
¿Qué
debería
mejorar
de
esta
relación
para
que
fuera
más
fluida?
Es
preciso
mejorar
la
formación
de
los
fiscales
en
estas
cuestiones,
somos
nosotros
quienes
debemos
dar
información
a
los
ciudadanos.
El
problema
es
que
carecemos
de
formación
para
hacerlo
correctamente.
¿Está
de
acuerdo
en
que
más
vale
contar
un
hecho
que
ocultarlo?
Por
supuesto,
pero
hay
que
valorar
muchas
cuestiones
a la
hora
de
dar
información.
Es
preciso
la
certeza
absoluta
de
lo
que
se
cuente,
ponderar
otros
derechos
en
conflicto,
preservar
la
eficiencia
de
la
investigación
Por
lo
que
hemos
conocido
del
trabajo
de
las
fiscalías
en
toda
España,
podría
ser
interesante
que
contasen
con
gabinetes
de
comunicación
similares
a
los
del
CGPJ.
¿Qué
opinión
le
merece
esta
iniciativa?
Es
esencial.
Los
gabinetes
de
prensa
están
funcionando
pero
no
son
ellos
quienes
tienen
la
obligación
legal
de
informar.
Los
portavoces
fiscales
por
muy
bien
preparados
que
se
encuentren
carecen
de
conocimientos
para
gestionar
las
relaciones.
Precisamos
de
profesionales
para
todas
estas
cuestiones.
¿Entiende
la
sociedad
el
papel
que
hacen
ustedes,
los
fiscales?
No,
desgraciadamente
la
sociedad
desconoce
qué
hacemos,
los
motivos
que
nos
llevan
a
ello
y
las
funciones
que
tenemos
encomendadas.
Todos
somos
responsables
en
esa
falta
de
información.
Algunos
detractores
del
Consejo
Fiscal
señalan
que
AF y
UPF
son
una
réplica
de
PP y
PSOE
a
nivel
de
asociaciones.
Solamente
puedo
hablar
por
la
AF,
con
cualquier
gobierno
hemos
mantenido
las
mismas
posturas,
hemos
criticado
a
unos
y a
otros,
hemos
pedido
la
dimisión
de
fiscales
generales,
propuestos
por
ambos
partidos,
y
tenemos
nula
relación
con
cualquier
partido
político.
Desgraciadamente
quienes
nos
hacen
esa
crítica
lo
utilizan
como
único
argumento
para
intentar
obtener
representación
en
el
Consejo
Fiscal,
es a
la
AF a
la
que
los
compañeros
reiteradamente
muestran
su
apoyo
electoral.
En
la
reforma
de
la
LECRIM
se
ha
dejado
al
margen
darle
la
instrucción
al
fiscal.
¿Tan
complicado
es
para
que
no
se
haya
podido
incluir
en
esta
legislatura?
Es
una
reforma
muy
compleja.
Es
comprensible
que
desde
el
cambio
en
el
Ministerio
no
haya
sido
posible
su
reforma
integral.
Desde
fuera
asuntos
como
el
de
caso
Noos
o el
de
Bárcenas
da
la
sensación
que
no
benefician
mucho
a la
imagen
institucional
que
tenemos
sobre
el
Ministerio
Fiscal
La
actuación
del
fiscal
solamente
se
puede
valorar
desde
criterios
jurídicos.
Estamos
acostumbrados
a
ver
a
personas
dando
una
opinión
y si
el
fiscal
hace
lo
que
él
cree
somos
muy
buenos
y en
caso
contrario
se
ha
obedecido
órdenes.
Es
las
cuestiones
de
tribunales
siempre
hay
dos
partes
y a
quien
n se
le
da
la
razón
le
es
más
fácil
criticar
al
fiscal
por
política
que
por
argumentos.
¿Qué
noticia
le
gustaría
dar
que
hasta
la
fecha
no
ha
podido
dar?
La
reforma
integral
de
la
administración
penal
en
España
Por
último,
se
ha
invertido
mucho
en
justicia,
pero
sus
carencias
siguen
siendo
crónicas,
¿Cómo
solucionar
este
problema?
Es
posible
que
sea
necesario
hacer
una
valoración
de
todas
nuestras
carencias,
elaborar
un
plan
de
reformas
y
además
sería
interesante
redimensionar
nuestras
funciones.
Debemos
intervenir
en
el
mínimo
de
funciones
esenciales.
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