Las moratorias concursales reducen los concursos de empresas al 0,8% en 2021

Publicado el viernes, 1 julio 2022

Anuario de la Estadística Concursal 2021 del Colegio de Registradores

En 2021 el número de concursos necesarios de empresas analizados, según la fecha del auto de declaración, ha sido de 39, un 0,8% del total, y presumiblemente se trata de concursos solicitados previamente a la entrada en vigor de la primera moratoria concursal, que hoy finaliza, pero cuyo inicio se ha retrasado por causas extraordinarias”. Pese a la inadmisión a trámite de los concursos solicitados por los acreedores (necesarios), el número total de concursos en 2021 se ha incrementado en un 25%. Sin embargo, los pasivos afectados por procedimientos concursales disminuyen casi un 58% respecto a 2020, así como un 31% el número total de trabajadores afectados. La concursada típica continúa perteneciendo al sector servicios (no inmobiliarios), inicia el procedimiento con diez años de antigüedad, y tiene contratados más de 5 empleados. Este año, sin embargo, su pasivo tan sólo supera ligeramente los 200.000 euros, muy por debajo de los 300.000 de 2020 o los casi 600.000€ de 2015.

Estas son algunas de las conclusiones extraídas del Anuario Concursal elaborado por el Colegio de Registradores, con el asesoramiento científico de la UAB, cuyo estudio completo se puede consultar en https://www.registradores.org/actualidad/portal-estadistico-registral/estadisticas-concursales

El 44,3% de los concursados muestra fondos propios negativos, es decir, carece de patrimonio alguno. Poco más del 18% tendría capacidad financiera suficiente como para cumplir un convenio aprobado dentro de los límites habituales de la Ley concursal.

En 2021 la proporción de concursos de sociedades del ciclo de la construcción se mantiene estable alrededor del 20%, lejos del 27,2% de 2017 o el todavía más lejano 48,3% de 2008. Del total de concursadas, pertenecen al sector de servicios no inmobiliarios el 66,5% de las sociedades.

Reasignación de recursos y recuperación del crédito

En 2021, y ya como característica estructural del procedimiento, de las 1.899 fases sucesivas iniciadas (convenio o liquidación), un 86,6% (85,5 en 2020) fueron liquidaciones directas, y un 8,4% (8,3 en 2020) liquidaciones procedentes de intentos fallidos de reestructuración.

En más de 2.700 casos (1.700 en 2020), se produce la apertura y conclusión del concurso simultáneamente, por insuficiencia de recursos del deudor para sufragar el procedimiento concursal.

En relación con las expectativas de cobro de los acreedores ordinarios (y siempre bajo el supuesto de cumplimiento íntegro de los pagos), la mediana de la expectativa de cobro de las deudas en 2021 fue del 47,5%, muy similar a los dos años precedentes (47,6%), con un punto de diferencia entre propuestas anticipadas de convenio, esto es, sin necesidad de celebración de junta de acreedores, y aquellas que siguen el procedimiento habitual. En un 25% de los casos esta expectativa de cobro es superior al 65% de las deudas, y más del 96% solamente se devolvería en el 5% de los convenios aprobados.

Duración del concurso 

Diferenciando por tipo de tramitación, en los concursos abreviados la fase sucesiva (liquidación o convenio) se inicia en menos de un año en el 61% de los casos (66,4% en 2020, y 62,3% en 2018), mientras que en los ordinarios ese plazo solo lo cumplen el 48% (46,6 en 2020). Sea cual sea la tramitación, el procedimiento es típicamente más rápido en aquellos concursos solicitados por el deudor, es decir, voluntarios.

En 2021 se ha estimado que el concurso típico abreviado (liquidatorio) tarda 65 días en concluir, 1.601 días si excluimos aquellos con conclusión de concurso simultánea a la declaración (concursos exprés); mientras que los ordinarios requieren de 2.716 días (2,512 en 2020, 2.077 en 2019, 2.009 en 2018 y 1.698 en 2017). La mayor parte de este tiempo se consume en la fase de liquidación, siendo ajeno por tanto a cuestiones procesales.

La existencia de dos autos consecutivos de apertura de fase sucesiva (de convenio y de liquidación) extiende extraordinariamente la fase común en la tramitación abreviada (218 días más), siendo la diferencia incluso mayor en los concursos ordinarios (316 días más).

En este anuario no se observa asociación positiva entre la dimensión de la concursada y la duración de la fase común (previa al convenio o la liquidación, por tanto, tiempo atribuible enteramente al procedimiento y no a operaciones societarias como la liquidación). Si bien, es en el grupo de concursos ordinarios de mayor duración donde encontramos el 5% de empresas de mayor tamaño de toda la muestra, con pasivos superiores a los 53 millones de euros, cuando el pasivo típico de este grupo se sitúa en los 6,2 millones de euros.

Ciclo de la Construcción

Con un aumento notable en el número de sociedades concursadas, el ciclo de la construcción mantiene este año su representatividad, con un total del 20,75% de la muestra, cifra en descenso hasta 2020 (20,5% en 2020, 23,1% en 2019, 27,3% en 2017, 32,8% en 2015, 41,1% en 2013). Del total de pasivos afectados en 2021 (más de 3.400 millones, frente a los 8.100 millones de 2020, o los 7.700 de 2019), la participación de la construcción repunta con fuerza hasta el 34% de ese importe (15,8% en 2020).

De forma similar a ejercicios anteriores las sociedades inmobiliarias reflejan los peores niveles de viabilidad: en caso de generar recursos positivos (41% de los casos) requerirían 16 años para atender la totalidad de sus pasivos. Sin embargo, esta perspectiva ha mejorado notablemente respecto a años anteriores (25 años en 2020, 33 en 2019, o 28 en 2018). La sociedad típica del subsector de la Construcción con recursos generados positivos, el 49% del total, tardaría 10 años (13 en 2020, 15 en 2019) en atender todas sus deudas.

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