Pilar Matilla, abogada de familia y socia de AMAFI.
El pasado 26 de abril del 2023, una vez más, la ASOCIACIÓN MADRILEÑA DE LA ABOGACÍA DE FAMILIA E INFANCIA (www.somosamafi.org) consciente de la situación que sufrimos los abogados por los retrasos en los juzgados quiso acercar a sus asociados los métodos alternativos de resolución de conflictos en una jornada celebrada en el Consejo General de la Abogacía.
En esta jornada tuvimos el honor de tener como ponente en una de las mesas redondas organizadas a D. Daniel Jorge Bustelo, presentado y moderado por nuestra socia Dª Ana Piernas López, abogada, mediadora y coordinadora de parentalidad tanto en España como en Alemania.
Daniel Jorge Bustelo es conocido por muchos de nosotros como el padre de la Mediación en España, quien la trajo desde Argentina hace ya 33 años, dedicando toda su trayectoria profesional a darle cabida y fomentarla aquí en España como método de resolución de conflictos alternativo a la vía judicial, teniendo en su haber multitud de acuerdos en materia de familia, abogando por un método pacífico en la resolución de crisis y asunción de responsabilidades familiares.
Compartió generosamente en su ponencia, las conclusiones extraídas fruto toda una vida de experiencias en el ejercicio de la función mediadora, que recoge en su último libro ya publicado «La función Mediadora».
Como seres vivos tenemos que adaptarnos a nuestro entorno, y la Mediación como método de resolución de conflictos no puede ser menos, y para lograr el éxito de la misma el punto clave es la importancia de la cultura de los mediados.
Es fundamental tener en cuenta las características culturales o interculturales de las personas partícipes o mediados, D. Daniel Bustelo nos compartía su visión de la necesidad de adaptar los modelos de mediación de Harvard y el circular narrativo a nuestra cultura latina que, si por algo se caracteriza, es por la naturaleza pasional en la manifestación de las emociones, resaltando la importancia de la reformulación de las mismas y suavizar su expresión, para poder, posteriormente, reformular las palabras y sentar las bases de una fructífera toma de acuerdos. Entiende que, el pilar de la mediación reside en la Escucha Activa del mediador, «cuando escuchamos la gente habla», “when we listen people talk”; igualmente nos hizo partícipes de la resonancia de las palabras en el mediador, siendo fundamental la labor de éste en cuanto a la resignificación de las mismas, recomendando como herramienta fundamental el uso del rotafolios en las sesiones.
Desde su punto de vista el carácter obligatorio de la mediación en la nueva Ley de Eficiencia Procesal choca con la propia esencia de la figura de la mediación, que es la voluntariedad de base por los partícipes o mediados, presupuesto ineludible para conseguir el buen logro de los objetivos que se pretenden.
Recalcó igualmente la necesidad de que la figura del Mediador tenga un sitio independiente, al igual que el resto de los operadores jurídicos, sociales y psicológicos, para evitar suspicacias en cuanto al ámbito de actuación de cada cual, entendiendo que cada conflicto es único y su solución necesitará de un profesional determinado, entendiendo que el ejercicio de la labor profesional de unos y otros debe estar íntimamente ligado y a la vez ser objetivamente independiente para el buen funcionamiento del sistema.
No obstante, habrá que ir viendo la aplicación práctica de la nueva Ley de Eficiencia Procesal y ver si, finalmente, la figura mediadora consigue el objetivo querido por el legislador, impulsándola en el lugar merecido y consiguiendo una efectiva descarga del sistema judicial, muy necesaria en estos momentos.
Como siempre, un gran placer poder escuchar y aprender de grandes expertos en los seminarios de AMAFI, participando en los interesantes debates que se forman y que nos enriquecen a todos en nuestra labor profesional.