Beatriz Uriarte y Juan Gonzalo Ospina
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid -TSJM- ha tenido en cuenta el recurso de apelación que pedía la revocación de la sentencia por abuso sexual firmada por la Audiencia Provincial de Madrid, y que condenaba a 8 años y 6 meses, así como al pago de 15.000 euros a la víctima por los daños morales, al acusado por un delito de abuso sexual continuado a la hija menor de su pareja, entre el año 2009 y 2012.
LAS CLAVES DE LA REVOCACIÓN
Para que el Tribunal absolviera al acusado, cuatro aspectos han sido determinantes en el escrito de apelación confeccionado por la defensa: El relato vago y poco coherente de la supuesta víctima; la prueba pericial del equipo psicológico; la ausencia de pruebas, así como los testimonios encontrados; y un motivo espurio económico. Aportes todos ellos desoídos por la Audiencia Provincial, quienes, si dieron veracidad al testimonio de la joven por encima del resto de elementos, a pesar de ser un relato con contracciones, como afirmó el Tribunal Superior de Justicia.
UN TÁNDEM EXPERTO EN DELITOS SEXUALES
La defensa fue gestionada por Beatriz Uriarte, abogada penalista experta en delitos sexuales, y Juan Gonzalo Ospina, experto penalista en juicios orales, ambos del despacho Ospina Abogados, quienes identificaron los flecos del relato de la denunciante, sosteniendo que la imputación de los hechos a su cliente eran fruto de un móvil espurio económico. Los penalistas alegaron que la mujer denunció los supuestos abusos en abril de 2019 (con 19 años), cuando el acusado, quien había mantenido años antes una relación con su madre inició una nueva vida sentimental con otra mujer, dejando de apoyar económicamente a estas, calculándose que desde que dejaron la relación hasta el momento de la denuncia les pudo facilitar un total de 10.600 euros.
La defensa señalaba en su recurso que la Audiencia Provincial había desoído el informe pericial de las psicólogas, quienes determinaron que “la menor simula” y no le dan credibilidad, entendiendo estar contaminado por familiares próximos.
Un relato que alcanzaba fases de extrema contradicción, hasta el punto de introducir nuevos hechos que no habían sido referidos ni en sede policial, ni en sede de instrucción ni a las psicólogas, “con un claro halo de magnificar lo ocurrido, ofreciendo un relato con inconcreciones y no creíble”, se lee en la sentencia.
De igual manera, para la defensa penal, la sentencia condenatoria pasa por alto que la denunciante tuvo un problema de sobrepeso que pudo llevar parejo un trastorno psicológico, reiterando que su representado se continuaba declarando inocente de todos los hechos señalados, y que, durante muchos años después de los supuestos hechos, la relación entre la denunciante y el denunciado fue fluida y de confianza, a pesar de no ser ya la pareja de su madre.
REVOCACIÓN Y ABSOLUCIÓN DEL TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA
Entendiendo los letrados de Ospina Abogados, considerado uno de los mejores despachos penalistas del momento, que, la Audiencia Provincial vulneraba con su condena el principio in dubio pro reo, ante: la ausencia de pruebas y los testimonios encontrados, los informes de las psicólogas, así como los cambios de versiones por parte de la denunciante, solicitaban la revocación de la sentencia que pesaba sobre el acusado y la absolución de los cargos.
Aspectos que atendió en su totalidad el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, quien estima el recurso interpuesto, dejando sin efecto la sentencia recaída en la primera instancia en junio de 2022, y absolviendo al procesado del delito continuado de abusos sexuales, apreciando “dudas razonables, y razonadas en la forma expuesta, que han de abocar a un fallo absolutorio, de conformidad con el principio in dubio pro reo”, reza el fallo firmado el 14 de diciembre de 2022.
