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Marketing
&
Law |
José
Ramón
Moratalla
Escudero
-
@jrmoratalla |
Los
Legal
Angels
como
nuevo
modelo
de
compromiso
de
voluntariado
jurídico
que
permite
compartir
talento,
experiencia
y
conocimiento |
28
de
ABRIL
de
2014 |
La
situación
de
excepcionalidad
social,
así
como
de
desamparo
jurídico
que
ha
traído
consigo
la
crisis
económica
junto
con
la
deriva
a la
que
nos
han
conducido
las
nefastas
decisiones
políticas
adoptadas
por
el
actual
Ministerio
de
Justicia
en
materia
de
Tasas
Judiciales
y
Justicia
Gratuita,
imponen
plantearse
asumir
un
acto
personal
y
desinteresado
de
generosidad
que,
–a
su
vez-,
implica
el
abandono
de
nuestra
actual
zona
de
confort.
Se
trata
en
definitiva
de
decidir
voluntariamente
la
adopción
del
nuevo
modelo
de
compromiso
o
contrato
de
voluntariado
jurídico,
al
que
podríamos
denominar
de
“Legal
Angels”.
En
la
universidad
aprendimos
el
clásico
adagio
del
ubi
societas,
ibi
ius,
y
podríamos
continuar
construyendo
el
silogismo
añadiendo
como
premisa
que
donde
hay
Derecho
también
hay
talento
(al
menos
hemos
de
presumirlo).
Y
llegado
al
tema
del
talento,
corresponde
abordarlo
hoy
en
relación
con
los
supuestos
de
extinción
de
la
prestación
del
ejercicio
profesional,
cuando
tienen
su
causa
en
razones
inexorables
como
son
la
edad
o la
enfermedad.
Estas
situaciones
que
afrontan
habitualmente
los
departamentos
de
Recursos
Humanos,
evidencian,
en
muchas
organizaciones,
importantes
carencias
en
los
modelos
aplicados
para
la
gestión
del
talento
y
conocimiento
que
por
dichos
motivos
–de
allí-
se
deslocaliza
y
termina
inexorablemente
perdiéndose.
Hace
tiempo
tuve
oportunidad
de
conocer
la
existencia
de
la
Asociación
de
Jueces
y
Magistrados
Jubilados
de
España
(AMAJE)
y
fui
entonces
consciente
de
la
enorme
importancia
del
caso.
Me
explico.
Muchos
profesionales
del
Derecho
que
han
ido
atesorando
a lo
largo
de
su
andadura
de
ejercicio
un
savoir
faire
profesional
de
incalculable
valor,
llegado
el
momento,
ven
aparcadas
sus
carreras
coincidiendo
con
una
situación
personal
de
plena
lucidez
mental
y
acarreando
consigo
un
bagaje
repleto
de
experiencia,
conocimientos
y
resultados.
Y
suele
ocurrir
en
gran
medida
que
lejos
de
querer
“colgar
las
botas”
e
ingresar
en
la
orden
contemplativa
o
“jubilativa”
(beatus
ille
qui
procul
negotiis
que
diría
Horacio)
de
la
que
resultan
–por
justicia-
merecidos
acreedores,
estos
profesionales,
conscientes
de
su
valía
y
enorme
potencial,
consideran
que
se
hallan
en
un
momento
idóneo
para
poder
revertir,
generosa
y
desinteresadamente,
mucho
de
su
know
how
a la
sociedad.
El
talento
debe
fluir,
no
debe
estancarse,
y en
una
coyuntura
plena
de
incertidumbres
como
la
actual,
las
organizaciones,
incluidos
los
despachos
profesionales,
empiezan
a
ser
requeridos
socialmente
para
acometer
medidas
efectivas
en
materia
de
responsabilidad
social.
Llamamiento
éste,
al
compromiso,
que
resulta
-cada
vez
más-
difícil
eludir.
En
este
sentido,
figuras
jurídicas,
instituciones
o
entidades
tanto
públicas
como
privadas
entre
las
que
caben
destacarse:
el
beneficio
de
justicia
gratuita,
el
Turno
de
Oficio,
el
Defensor
del
Pueblo,
organizaciones
de
consumo,
fundaciones
por
la
defensa
de
los
Derechos
Humanos,
organizaciones
de
víctimas
del
terrorismo,
oficinas
de
defensor
del
paciente,
etc.
no
bastan.
Y si
en
el
mundo
anglosajón
y
parte
de
la
Europa
continental
se
está
imponiendo
el
modelo
de
la
Justicia
Pro
bono
por
la
cual
abogados
junto
con
otros
profesionales
jurídicos
como
jueces,
fiscales,
notarios…,
dedican
gratuitamente
unas
horas
de
su
trabajo
al
mes
a
este
tipo
de
causas,
aquí
y
ahora,
en
España,
hemos
de
seguir
el
ejemplo
y si
cabe
avanzar
un
paso
más
adelante.
En
efecto,
ante
“esta
mala
hora
que
nos
toca
vivir”,
que
diría
Gabriel
García
Márquez,
es
hora
de
abrir
paso
a un
nuevo
modelo
de
voluntariado
social,
sostenido
y a
ser
posible
comprometido
a
nivel
personal,
que
corresponde
atender
desde
el
amplio
y
variado
espectro
profesional
jurídico
con
los
más
necesitados:
inmigrantes,
personas
sin
recursos,
desempleados,
expresidiarios,
marginados,
etc.
Se
trata
de
establecer
unos
nuevos
parámetros
que
resulten
exigibles
tanto
a
nivel
de
las
organizaciones,
como
individual,
es
decir,
a
los
propios
profesionales,
que
decidan
voluntariamente
sumarse
a
tal
noble
causa.
Y es
que
hay
mucho
por
hacer
para
quienes
encarnarían
este
nuevo
modelo
de
compromiso
o
contrato
de
voluntariado
jurídico,
que
podríamos
denominar
como
“Legal
Angels”.
Pues
ante
ellos
están
todos
los
necesitados
de
una
asistencia
jurídica
personal
de
supervivencia,
esos
mismos
que
cada
vez
encuentran
más
complicado
el
acceso
al
derecho
de
la
tutela
-tanto
jurídica
consultiva,
como
judicial-
efectiva,
incluidos
colectivos
como:
las
personas
con
riesgo
de
exclusión
social,
los
parados,
las
personas
mayores,
los
desvalidos
en
general,
pero
sin
olvidarnos
también
de
la
faceta
de
labor
de
mentoring
que
precisan
igualmente
otros
colectivos
como
ocurre
con
los
emprendedores,
los
jóvenes
colegiados,
los
estudiantes…,
en
definitiva,
muchos
casos
de
necesitados
-ávidos
todos-
de
beneficiarse
del
talento,
experiencia
y
conocimiento
que
aquéllos
podrían
compartir.
“Yo
creo
que
todavía
no
es
demasiado
tarde
para
construir
una
utopía
que
nos
permita
compartir
la
tierra”.
(La
mala
hora,
Gabriel
García
Márquez,
1962)
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Marketing
&
Law |
José
Ramón
Moratalla
Escudero
-
@jrmoratalla |
|
Abogado
Colegiado
nº
98.477
del
Ilustre
Colegio
de
Abogados
de
Madrid,
es
miembro
de
ACIJUR,
así
como
de
la
Red
de
Innovadores
INFONOMÍA
y de
Networkingactivo.
En
cuanto
a su
formación
cabe
destacar
que
es
Licenciado
en
Derecho
por
la
Universidad
Complutense
de
Madrid
(1986-1991),
habiendo
sido
becado
durante
la
licenciatura
por
seis
universidades
españolas,
cursando
con
posterioridad
los
master
en
Dirección
de
RRHH
por
el
ISEE,
y en
Dirección
de
Marketing
y
Gestión
Comercial
(GESCO)
por
el
ESIC,
además
de
atesorar
una
amplia
y
valiosa
formación
continua
de
nivel
executive
en
las
áreas
jurídica
y de
marketing,
marketing
online
y
contenidos
digitales
desarrollada
entre
otros
centros
de
formación
especializada,
en
IIR
España,
IDC,
ESADE
y
CEF,
principalmente.
Profesionalmente,
cuenta
en
su
haber
con
más
de
15
años
de
experiencia
en
el
área
de
Marketing
en
las
principales
empresas
de
los
sectores
editorial
y de
formación
jurídica,
habiendo
desarrollado
su
carrera
profesional,
por
este
orden,
en
Wolters
Kluwer,
El
Derecho
Editores,
Grupo
Difusión,
Grupo
Editorial
El
Derecho
y
Quantor,
y
Ediciones
Francis
Lefebvre,
desempeñando
paulatinamente
los
cometidos
de
Gerente
de
Marketing,
Comunicación
y
Relaciones
Institucionales,
Director
de
Marketing,
Coordinador
de
Proyectos
Especiales
del
departamento
de
Desarrollo
de
Negocio,
y
actualmente
en
el
área
de
Estudios
de
Mercado
del
departamento
de
Desarrollo
Editorial.
Autor
de
artículos
jurídicos
y de
marketing
cuenta
con
numerosas
colaboraciones
en
medios
impresos
y
digitales
como
La
Gaceta
de
los
Negocios
en
su
suplemento
Legal
y
Fiscal,
las
revistas
Economist
&
Iuris,
Inmueble,
Ayuntamiento
XXI,
Bar
&
Restaurante,
así
como
en
los
portales
Microsoft,
El
Derecho,
LawyerPress,
etc…
También
ha
sido
subdirector
de
la
revista
Ayuntamiento
XXI,
asimismo
coordinador
y
miembro
de
su
Consejo
Editorial.
Cuenta
con
cuenta
en
Twitter
@JRMORATALLA,
y
perfil
en
las
redes
profesionales
Linkedin
y
Xing.
En
el
plano
personal,
casado
y
dos
hijos,
y
tiene
a
bien
lucir
su
condición
de
sisanteño
(natural
de
Sisante).
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