Reclamaron
poder
tener
un
papel
más
activo
en
la
protección
al
ciudadano.
El
fundamento
ético
y
moral,
la
labor
asesora
y el
control
de
legalidad,
la
protección
al
ciudadano,
la
apuesta
tecnológica
y la
colaboración
con
la
Administración,
entre
los
grandes
retos
Este
fin
de
semana
tuvo
lugar
la
Jornada
Notarial
de
Sant
Benet,
una
sesión
de
debate
y
reflexión
que
reunió
a 70
notarios
que
ejercen
en
Cataluña
– un
15%
del
total
-
en
el
Monasterio
de
Sant
Benet
para
debatir
acerca
del
presente
y de
los
retos
de
futuro
de
la
profesión.
En
el
transcurso
de
la
Jornada,
organizada
con
la
voluntad
de
fomentar
la
participación,
la
reflexión
y el
debate
sobre
temas
de
máxima
actualidad
e
interés
de
la
profesión,
se
debatió
acerca
de
“Las
relaciones
entre
compañeros
y la
conexión
con
la
sociedad”,
a
cargo
de
Albert
Domingo,
notario
de
Vilassar
de
Mar,
y
Victor
Asensio,
notario
de
Arenys
de
Munt;
“Ancert:
¿amigo
o
enemigo?,”
a
cargo
de
César
Belda,
decano
del
Colegio
Notarial
de
Valencia
y
Consejero
Delegado
de
Ancert,
y
Juan
Antonio
Andújar,
notario
de
Barcelona;
“El
papel
de
los
Colegios
Notariales
en
el
siglo
XXI”,
a
cargo
de
Marta
Clausí,
notaria
de
Tárrega,
y
Fermín
Moreno,
notario
de
Tarazona;
y
“Acceso
a la
profesión,
el
Estatuto
de
Cataluña
y
nuevos
retos”,
mesa
redonda
en
la
que
participaron
Cristina
García
Lamarca,
notaria
de
Manresa;
María
Sáez
de
Santamaría,
notaria
de
Tarragona;
Ángel
Serrano,
notario
de
Barcelona;
Francesc
Torrent,
notario
de
El
Masnou,
y
Juan
Gómez
Martínez,
notario
de
Sabadell.
En
su
intervención
final,
Joan
Carles
Ollé,
decano
del
Colegio
Notarial
de
Cataluña,
quiso
destacar
especialmente
algunos
de
los
retos
fundamentales
de
la
función
notarial.
Así,
remarcó
que
“el
principal
tesoro
que
tenemos
es
el
fundamento
ético
y
moral
de
la
profesión,
que
es
el
que
nos
da
credibilidad”,
y
destacó
“la
labor
asesora
y el
control
de
legalidad,
que
justifica
la
utilidad
del
notario
ante
la
sociedad”,
así
como
el
importante
papel
del
notario
en
la
protección
al
ciudadano.
En
este
sentido,
reivindicó
“las
modificaciones
legislativas
que
sean
necesarias
para
reforzar
esta
protección
como,
por
ejemplo,
en
materia
de
cláusulas
abusivas”,
para
las
que
solicitó,
una
vez
más,
“que
el
notario
pueda
realizar
un
control
efectivo
de
legalidad,
ya
que
el
actual
control
no
funciona
y
perjudica
a
los
ciudadanos”.
En
cuanto
al
ámbito
tecnológico,
quiso
recordar
que
“la
apuesta
tecnológica
ha
sido
crucial
para
el
Notariado”,
recordando
que
“la
profesión
se
sitúa
a la
vanguardia
en
este
ámbito
gracias
a la
creación,
hace
ya
14
años
de
Ancert”,
la
Agencia
de
Certificación
Notarial
que
constituye
la
plataforma
tecnológica
del
Notariado
y
permite
que
los
3000
notarios
españoles
estén
conectados
entre
ellos
y
con
las
principales
administraciones.
En
cuanto
a la
colaboración
con
la
Administración,
Ollé
afirmó
que
“el
gran
reto
es
mantener
el
equilibrio
entre
esta
colaboración
y la
utilidad
y el
servicio
a
los
notarios”.
Finalmente,
recordó
“la
importante
función
del
Consejo
General
del
Notariado
y de
los
Colegios,
labor
esta
última
que
debe
también
ser
preservada”
y
afirmó
que
“las
reformas
de
la
organización
corporativa
deben
mantener
el
equilibrio
entre
ambas
instituciones”.
Por
último,
recordó
que
el
Notariado
es
un
cuerpo
único
estatal
pero
que
“las
Comunidades
autónomas,
entre
ellas
Cataluña,
tienen
determinadas
competencias
que
se
ejercen
de
manera
coordinada
entre
las
dos
administraciones,
con
diálogo
y
están
funcionando
muy
bien,
como
los
concursos
coordinados
o la
demarcación.”
En
definitiva,
afirmó,
“somos
una
profesión
útil
para
el
ciudadano,
viva
y de
futuro”.
El
coordinador
de
la
Jornada,
Joan
Carles
Farrés,
valoró
muy
positivamente
el
encuentro
“tanto
por
la
importante
asistencia
como
por
la
diversidad
y la
transversalidad
de
los
notarios
participantes,
así
como
por
el
acierto
en
los
temas
expuestos
y la
participación
activa
de
todos
los
asistentes”.
Todo
ello,
afirmó,
demuestra
que
“el
Notariado
es
una
institución
viva
y
mira
el
futuro
con
confianza
porque
estamos
seguros
de
que
podemos
todavía
servir
más
y
mejor
a la
sociedad
ante
los
nuevos
retos
que
nos
presente
el
futuro”.
La
Jornada
fue
clausurada
por
Santiago
Ballester,
director
general
de
Derecho
y
Entidades
Jurídicas
de
la
Generalitat
de
Cataluña,
quien
recordó
que
“los
notarios
tenéis
un
gran
prestigio
ganado
a
pulso.”
Aseguró
que
“vuestra
actividad
como
fedatarios
públicos
es
cada
vez
más
importante
y
habéis
pasado
de
ser
necesarios
a
imprescindibles
en
la
defensa
de
la
seguridad
jurídica
preventiva”
y
destacó
así
mismo
“la
gran
labor
desarrollada
en
el
ámbito
del
desarrollo
del
Derecho
Civil
en
Cataluña”. |