Esta
Comisión
del
Colegio
de
Abogados
de
Barcelona
apoya
la
proposición
de
ley
para
modificar
la
actual
Ley
e
Protección
de
los
animales.
La
Comisión
de
Protección
de
los
Derechos
de
los
Animales
(CPDA)
pone
de
manifiesto
el
aumento
de
la
preocupación
social
sobre
el
sufrimiento
de
los
animales
y su
voluntad,
no
regular,
sino
de
abolir
las
condiciones
de
cautiverio
en
que
se
encuentran,
ante
este
tipo
de
espectáculos.
La Comisión de Protección
de
los
Derechos
de
los
Animales
(CPDA)
apoya
la
proposición
de
modificación
de
la
Ley
de
Protección
de
los
Animales
del
Parlamento
de
Cataluña,
en
el
que
se
pretende
abolir
el
espectáculo
de
los
animales
en
el
circo.
Según
la
CPDA,
la
solución
es
la
abolición
no
la
regulación,
ya
que
esta
última
iría
en
contra
de
la
naturaleza
de
la
Ley
de
protección
de
los
animales,
que
los
considera
"seres
vivos
dotados
de
sensibilidad
física
y
psíquica
y de
movimiento
voluntario.
Los
seres
vivos
deben
recibir
el
trato
que
atendiendo
básicamente
a
sus
necesidades
etológicas,
procure
su
bienestar",
opina
Carmen
Valenzuela,
diputada
responsable
de
la
Comisión.
En
los
circos
no
se
respetan
estas
condiciones
y
una
regulación
no
sería
factible,
teniendo
en
cuenta
la
naturaleza
transitoria
de
los
establecimientos
y la
incapacidad
de
proporcionar
las
condiciones
de
bienestar
necesarias
para
los
animales.
Según afirman los
expertos,
la
estimulación,
vivir
entre
rejas
o
atados
y la
privación
de
agua
y
alimento,
entre
otras
acciones,
los
puede
conducir
a
tener
comportamientos
agresivos
y
trastornos
psicológicos,
hasta
llegar
a
auto
mutilarse
o a
sentir
apatía
física.
A nivel supranacional,
de
la
UE,
la
preocupación
también
es
creciente.
Ya
algunos
estados,
como
Grecia
o
Malta,
han
prohibido
los
circos
con
todo
tipo
de
animales;
otros,
como
Bélgica
han
prohibido
los
circos
con
animales
salvajes.
Siendo
el
ámbito
catalán
un
referente
mundial
y
reputado
en
estos
temas,
la
proposición
de
ley
es
proteger
a
los
animales
de
sufrimientos
innecesarios
por
cuestiones
lúdicas,
por
diversión.
Carmen
Valenzuela
explica
que
"la
abolición
es
posible
gracias
a la
trayectoria
legislativa
catalana
en
este
tema.
En
este
sentido,
la
proposición
de
ley
prevé
tanto
la
protección
de
los
animales
salvajes
como
los
animales
domésticos,
entendiendo
que
también
han
de
alcanzar
el
nivel
máximo
de
amparo
legal
".
Desde la Comisión se
recuerda
que
la
ley
de
protección
de
1988
ya
prohibía
espectáculos
con
animales
si
esto
les
suponía
sufrimiento,
como
las
peleas
de
perros
y
gallos
o el
tiro
de
pichón.
En
los
últimos
años
se
han
añadido
a
esta
ley
la
prohibición
de
matanzas
públicas
de
animales
(2003),
las
atracciones
feriales
giratorias
con
animales
vivos
atados
y
otras
asimilables
(2006)
y ya
en
2010,
las
corridas
de
toros
y
otros
espectáculos
taurinos.
Sin embargo, los actuales
estudios
científicos
hacen
pública
la
situación
de
cautiverio
y
comportamiento
inhumano
que
reciben
los
animales
en
el
circo.
Por
este
motivo,
se
ha
podido
impulsar
la
iniciativa
legal
de
realizar
circo
sin
animales.
Desde la CPDA se hace
un
llamamiento
para
que
prevalezcan
los
valores
y
una
educación
basada
en
el
respeto
por
los
seres
vivos
en
los
circos. |