La
Plana
mayor
de
la
Abogacía
se
dio
cita
este
viernes
en
Reus
con
motivo
de
los
actos
que
tuvieron
lugar
del
170
Aniversario
de
esta
entidad
colegial.
El
lema
no
pudo
ser
más
acertado
“170
años
de
Justicia
de
Proximidad”,
un
comentario
que
explica
la
importancia
de
la
entidad
colegial
en
esta
localidad
tarraconense,
siempre
próxima
a su
sociedad.
Y es
que
junto
a
abogados
como
Carlos
Carnicer,
presidente
del
CGAE
y
Abel
Pie
del
Consell
también
acudieron
el
alcalde
de
Reus,
Carles
Pellicer,
el
director
general
de
Entitats
Jurídicas
y
del
Dret,
el
presidente
de
la
Audiencia
Provincial
de
Tarragona,
el
fiscal
jefe
de
Tarragona,
así
como
autoridades,
jueces
y
magistrados
de
la
ciudad,
los
responsables
de
los
cuerpos
de
seguridad,
representantes
de
entidades
de
la
ciudad
y
muchos
abogados.
“Lo
importante
en
estos
años
es
que
la
ciudad
ha
hecho
suyo
el
colegio
y
esto
es
lo
importante”,
explica
Pere
Huguet,
su
decano
actual
desde
el
2003
y
vicepresidente
del
CGAE.
Para
este
jurista
es
evidente
que
“Reus
se
dio
cuenta
que
apostar
por
la
justicia
y un
sistema
de
resolución
de
conflictos
era
parte
de
su
progreso”,
indica.
Huguet
recibió
del
presidente
Carnicer
la
Gran
Cruz
al
Mérito
en
el
Servicio
a la
Abogacía
en
el
citado
evento.
En
primera
persona
“Ya
en
el
siglo
XIII
la
ciudad
de
Reus
contaba
con
la
llamada
Veintecuatrena,
un
grupo
de
juristas
que
impartían
justicia
en
la
localidad.
Con
posterioridad,
en
1845,
que
es
la
fecha
de
fundación
del
Colegio
de
Abogados
su
primer
decano
Bernat
Torroja,
junto
con
una
comisión
de
ciudadanos
se
fue
a
Madrid
para
regresar
con
el
decreto
de
la
creación
de
la
Audiencia
de
la
Criminal
en
nuestra
ciudad.
Hay
que
reseñar
que
la
población
lo
asumió
como
un
éxito
y se
celebró
una
fiesta
con
motivo
de
este
logro.
Se
trataba
de
celebrar
que
ya
teníamos
esa
Audiencia
de
lo
Criminal,
antecedente
de
lo
que
hoy
es
la
Audiencia
Provincial.
Se
tiende
que
será
un
factor
de
progreso
de
la
ciudad.
Hay
poca
documentación
de
la
época
porque
alguna
se
destruyó.
Creo
que
este
concepto
de
proximidad
lo
ha
entendido
la
propia
ciudad.
Al
mismo
tiempo,
la
propia
ciudad
advirtió
que
esa
proximidad
tenía
que
estar
subrayada
con
la
presencia
del
Colegio
de
Abogados
que
se
encargara
de
salvaguardar
el
derecho
a la
defensa
de
los
ciudadanos
en
los
tribunales.
Esto
ha
hecho
que
la
ciudad
de
Reus
defendiera
como
institución
propia
su
institución
colegial.”
Sr
Huguet,
¿cuáles
son
las
fechas
claves
de
una
institución
tan
longeva
en
el
tiempo
como
el
propio
Colegio
de
Abogados
de
Reus?
Hay
muchas,
pero
le
voy
a
citar
algunas
de
las
más
recientes.
En
aquel
momento
que
el
decano
Enrique
Castro,
uno
de
mis
predecesores,
hizo
un
movimiento
convocando
a
todas
las
entidades
de
la
ciudad
para
que
se
construyese
un
nuevo
Palacio
de
Justicia.
De
hecho
se
llegó
a
montar
un
acto
con
esa
petición,
en
un
entorno
donde
en
aquel
momento
las
relaciones
entre
Ayuntamiento
y
Generalitat
no
eran
buenas.
Al
final,
el
logro,
tener
un
Palacio
de
Justicia
en
Reus
de
acuerdo
con
las
necesidades
de
nuestra
sociedad.
Y la
otra
fecha
más
reciente
tiene
que
ver
cuando
el
Proyecto
de
Ley
de
Servicios
y
Colegios
Profesionales
que
abanderaba
el
aquel
entonces
Ministro,
Alberto
Ruiz-Gallardón,
ponía
en
entredicho
el
futuro
del
Colegio.
En
ese
momento
todas
las
entidades
de
la
región
se
dirigieron
mostrando
su
apoyo
a la
propia
entidad
colegial.
Nadie
duda
que
gracias
a su
esfuerzo,
también
ayudaron
a
que
el
Ministerio
reconsiderase
esa
decisión.
¿Porqué
ha
tenido
este
Gobierno
a
los
Colegios
Profesionales
en
su
punto
de
mira?
Es
un
tema
que
se
repite
de
forma
cíclica
cada
cierto
tiempo.
No
es
una
cuestión
de
este
Gobierno
ni
la
del
anterior.
Si
analizamos
la
documentación
histórica
que
tenemos
en
el
Colegio
nos
damos
cuenta
que
cada
cierto
tiempo
aparece
esta
idea
de
suprimir
los
colegios
profesionales.
Esta
medida
viene
más
por
el
desconocimiento
de
la
función
que
cumplen
que
por
otras
circunstancias.
Siempre
cuando
me
preguntan
por
este
tema
me
viene
a la
memoria
el
modelo
francés
de
nuestro
país
vecino.
En
él,
hay
tantos
colegios
como
tribunales
y no
se
concibe
un
lugar
con
un
Palacio
de
Justicia
sin
ese
Colegio
de
abogados.
Y es
que
no
se
concibe
impartir
justicia
sin
que
exista
alguien
que
proteja
el
derecho
a la
defensa.
En
nuestro
país
no
debemos
discutir
más
sobre
este
tema
sino
que
si
hay
que
hablar
que
existe
en
todos
los
tribunales
alguien
que
respalde
el
derecho
a la
defensa.
¿Desde
su
punto
de
vista,
este
modelo
actual
de
83
Colegios
de
Abogados
es
operativo?
Creo
que
hasta
ahora
ha
funcionando
bastante
bien
y no
debería
tocarse.
Lo
que
desde
el
CGAE
y el
resto
de
los
Colegios
no
entendemos
es
el
porqué
se
quiere
modificar
si
realmente
sus
resultados
ahí
están.
En
cada
partido
judicial
están
instaurados
los
colegios
de
abogados
y el
modelo
funciona
hasta
la
fecha
sin
problemas.
Usted
lleva
doce
años
al
frente
del
decanato.
¿Se
muestra
satisfecho
de
los
logros
alcanzados
en
este
periodo
de
tiempo?
Lo
apuntaba
en
el
acto
de
celebración
de
este
pasado
viernes
que
este
mes
de
diciembre
acaba
mi
mandato
y no
me
presentaré
a la
reelección.
Creo
que
este
acto
corrobora
parte
de
los
objetivos
que
nos
pusimos
como
tarea
hace
años
cuando
asumimos
el
decanato.
Ver
a
tantas
autoridades,
asociaciones
en
esa
celebración
han
indicado
que
el
Colegio
de
Abogados
no
es
solo
de
los
letrados
sino
patrimonio
de
toda
la
ciudad
Creo
que
hemos
logrado
recuperar
el
espíritu
en
el
que
el
Colegio
como
los
que
trabajamos
en
la
entidad,
estamos
al
servicio
de
la
sociedad.
No
se
entienden
las
entidades
colegiales
sin
esa
vinculación
a su
entorno
más
próximo.
Llama
la
atención
que
ustedes
en
Reus
han
logrado
fidelizar
a
los
abogados
alrededor
de
su
Colegio,
cuestión
que
no
siempre
es
sencilla.
No
hay
fórmulas
mágicas,
pero
le
voy
a
dar
un
dato.
De
un
colectivo
de
303
abogados
residentes
ejercientes,
en
la
citada
cena
celebración
de
nuestra
efeméride
éramos
más
de
trescientos
invitados,
lo
que
habla
mucho
de
su
implicación
con
nuestra
institución.
Es
un
porcentaje
muy
alto,
del
que
nos
sentimos
orgullosos.
Además
de
esto,
creo
que
nuestros
colegiados
ven
cerca
a la
Junta
de
Gobierno.
Se
pueden
poner
en
contacto
con
nosotros
siempre
que
sea
necesario
de
forma
directa.
Así
tanto
el
Decano
como
cualquier
miembro
de
la
Junta
de
les
puede
atender.
Y lo
hacemos
con
sumo
gusto,
sin
lugar
a
dudas.
Al
mismo
tiempo
hemos
desarrollado
diferentes
actividades
formativas,
siempre
muy
vinculadas
al
propio
abogado
y su
carrera
profesional.
Siempre
hemos
ofertado
formación
de
calidad
que
les
ha
ayudado
a
mejorar
su
ejercicio
profesional.
De
manera
paralela,
nos
preocupa
cómo
trabajan
los
abogados
en
Reus,
y
estamos
en
contacto
directo
con
los
propios
magistrados
y
Salas
de
Gobierno
para
poder
mejorar
esas
condiciones
de
trabajo
que
no
siempre
son
las
más
idóneas.
Da
la
sensación
que
la
sensibilidad
que
hay
en
materia
de
justicia
por
parte
del
Consell
no
la
hay
por
parte
del
Ministerio
a
nivel
nacional.
Con
la
Generalitat
los
catorce
colegios
que
configuramos
el
Consell
mantenemos
unas
muy
buenas
relaciones.
Respecto
al
Ministerio
de
Justicia
salimos
de
una
etapa
negativa
con
Ruiz-Gallardon
en
los
últimos
tres
años.
Ahora
la
llegada
de
Catalá
ha
recuperado
el
diálogo
y es
posible
consensuar
muchas
de
sus
reformas.
Temas
como
el
de
la
Justicia
Gratuita
están
más
o
menos
solventados
en
Catalunya,
cuestión
diferente
en
el
resto
del
país
con
notables
retrasos
en
los
abogados
del
Turno
de
Oficio.
Es
verdad.
Creo
que
es
fundamental
que
la
Administración
Pública
crea
de
verdad
en
la
gestión
que
estamos
haciendo
los
Colegios
de
Abogados
de
la
Justicia
Gratuita.
Con
la
Generalitat
también
tuvimos
momentos
duros
sobre
esta
cuestión
pero
a
base
de
diálogo
y
reuniones
logramos
el
consenso
actual.
Cualquier
Administración
que
se
dé
cuenta
del
papel
que
jugamos
los
Colegios
de
Abogados
no
puede
más
que
sentarse
a
hablar
con
las
entidades
colegiales
para
buscar
una
solución
y
llegar
a un
acuerdo.
Así
lo
hemos
hecho
con
la
Generalitat.
Esta
es
la
manera
de
contar
con
una
abogacía
bien
formada
y
retribuida
puntualmente.
Respecto
al
dinero
de
las
tasas
judiciales,
que
iba
a ir
para
Justicia
Gratuita,
pero
ha
quedado
para
el
erario
público,
¿Qué
habría
que
hacer
con
esa
suma
tan
importante?
El
Ministro
tiene
que
cumplir
lo
que
dijo
y
destinar
el
dinero
de
las
tasas
a la
Justicia
Gratuita,
lejos
de
entrar
en
el
debate
si
soy
o no
partidario
de
ellas.
Se
trata
de
cumplir
un
mandato
legal
que
vendría
muy
bien
a
nuestra
justicia
gratuita.
¿Qué
espera
del
próximo
Congreso
de
la
Abogacía
que
tendrá
lugar
el
próximo
mes
de
mayo
en
Vitoria?
Es
una
cita
de
gran
importancia
donde
se
va a
demostrar
una
vez
más
que
la
abogacía
siempre
ha
estado
a la
vanguardia
desde
el
punto
de
vista
tecnológico.
Es
un
acierto
haber
centrado
el
tema
en
las
repercusiones
jurídicas
de
la
tecnología
aplicada
a
nuestra
profesión.
Vivimos
un
momento
de
modernización
de
nuestros
conceptos
jurídicos.
No
solo
hablaremos
de
tecnología
como
elemento
de
trabajo
sino
como
concepto
en
el
trabajo
diario
de
un
abogado.
La
tecnología
ya
es
una
parte
clave
que
condiciona
nuestro
ejercicio
profesional.
¿Será
posible
que
el
próximo
1 de
enero
tengamos
una
justicia
sin
papeles,
como
ha
anunciado
el
Ministro
Catalá?
Ojala
lo
consiga
aunque
el
plazo
es
justo
como
todos
sabemos.
Si
el
ministro
logra
contar
con
los
operadores
jurídicos
en
general,
y
con
la
abogacía
en
particular,
es
bastante
posible
que
el 1
de
enero
del
2016
tengamos
esa
justicia
sin
papeles.
Es
evidente
que
habrá
que
adaptar
Lexnet
al
nuevo
entorno
tecnológico
de
forma
definitiva.
Hasta
el
momento
su
puesta
en
marcha
se
demora
pese
a
que
la
abogacía
ha
mostrado
su
colaboración
con
el
propio
Ministerio
de
Justicia.
¿Cambiarán
mucho
los
Colegios
de
Abogados
por
la
propia
tecnología?
Es
posible
que
haya
cambios
pero
lo
más
importante
será
adaptarse
a
los
nuevos
entornos
que
surjan
de
estas
modificaciones.
No
obstante,
el
trabajo
hecho
desde
el
CGAE
a
través
de
Redabogacía
hará
que
este
tránsito
sea
menos
complicado
de
lo
que
se
espera.
A
día
de
hoy,
casi
todos
los
Colegios
estamos
interconectados
via
online.
Muchos
Colegios,
entre
ellos
Reus,
envían
ya
sus
actuaciones
del
Turno
de
Oficio
por
via
telemática.
Nosotros
ya
hemos
llegado
a la
justicia
sin
papeles. |