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A lo
largo
de
estos
tres
días
de
Congreso
de
la
Abogacía
madrileña
la
afluencia
de
juristas
interesados
en
alguna
de
las
ponencias
de
este
evento
multisectorial
ha
sido
notable.
En
esta
ocasión
desde
la
Sala
de
Prensa
que
el
equipo
de
prensa
del
ICAM
capitaneado
por
Luisa
Jaén
habilitó
para
los
periodistas
acreditados
en
este
evento,
ha
sido
el
lugar,
muy
cercano
a la
entrada
a
estas
jornadas,
desde
donde
hemos
podido
abordar
a
muchos
ilustres
juristas
interesados.
Estos
son
los
comentarios
de
algunos
de
ellos,
a
los
que
agradecemos
su
colaboración
siempre
que
contactamos
con
ellos.
La
gran
mayoría
de
los
profesionales
con
los
que
hemos
conversado
señalan
la
idoneidad
de
un
evento
que
ha
llegado
para
quedarse
en
la
agenda
de
los
abogados
madrileños.
También
destacan
la
altura
intelectual
de
los
ponentes
y la
actualidad
de
muchas
mesas
redondas,
algunas
de
ellas
con
reformas
legislativas
como
ya
anticipó
este
lunes
el
Ministro
Catalá
en
la
ceremonia
de
apertura
de
este
I
Congreso
de
la
Abogacía
Madrileña.
El
listón
se
ha
puesto
alto
habrá
que
ver
como
evoluciona
en
los
próximos
días.
Franco Conforti
acaba
de
concluir
su
ponencia
sobre
mediación
electrónica.
El
networking
le
ha
hecho
conocer
a
Santiago
Garcia,
economista
y
experto
consultor.
Con
ellos
nos
tomamos
uno
de
los
cafés
de
este
evento
mientras
conversamos:
“Para
ser
un
Congreso
de
Abogados
he
visto
mucho
interés
en
conocer
lo
que
es
la
mediación
online.
Sus
preguntas
revelan
que
están
interesados
en
conocer
cómo
funciona
esta
aplicación”,
apunta.
Nuestro
interlocutor
uno
de
los
expertos
más
reputados
en
esta
actividad,
es
habitual
en
eventos
de
este
tipo
donde
su
plataforma
despierta
mucho
la
atención.
“Hay
que
dejarles
claro
que
esta
es
una
práctica
diferente
a la
de
la
negociación
que
llevan
haciendo
toda
su
vida”,
indica.
A su
juicio
no
es
descabellado
que
el
mediador
profesional
acabe
por
instalarse
en
los
propios
despachos
de
abogados
mientras
se
especializa.
La
cabeza
consultora
de
Santiago
analiza
el
evento
con
parámetros
de
éxito
“hay
gran
afluencia
entre
todas
las
salas
por
lo
que
he
visto
en
estos
tres
días.
Para
ser
la
primera
vez
que
se
organiza
este
Congreso
está
bastante
bien”,
aclara.
El
otro
parámetro
que
comenta
es
el
grado
que
tienen
los
propios
abogados
que
esta
profesión
tenga
más
peso
específico
en
nuestra
sociedad.
“La
imagen
de
la
abogacía
debe
mejorar
para
la
propia
sociedad;
hay
grandes
despachos;
otro
segmento
medio
con
profesionales
entre
10 y
50
abogados
y
otro
más
numeroso
de
bufetes
de
trinchera,
con
socios
unipersonales,
profesionales
que
saben
de
todo
y
que
trabajan
mil
horas,
su
problema
es
que
no
llegan
a
todo,
la
maquinaria
jurídica
crece
y
los
clientes
son
exigentes”,
subraya.
Desde
su
punto
de
vista
la
mediación
es
necesaria
pero
de
la
necesidad
a la
demanda
hay
un
gap
que
no
se
está
cumpliendo.
En
uno
de
los
últimos
paseos
por
la
zona
de
los
stands
coincidimos
con
Antonio
Albanés
y
Joaquín
García-Romanillos,
dos
veteranos
abogados
muy
vinculados
al
ICAM.
El
primero
acaba
de
ser
nombrado
Secretario
General
de
la
Mutualidad
de
la
Abogacía
y
valora
de
forma
muy
positiva
la
celebración
de
este
Congreso.
Sobre
las
palabras
de
la
decana
Sonia
Gumpert
en
el
acto
de
apertura
las
valora
como
“valientes
y
llenas
de
contenido”.
Albanés,
experto
en
arbitraje
ha
sido
moderador
de
una
mesa
sobre
seguros
donde
se
ha
analizado
el
papel
de
los
abogados
en
relación
con
las
compañías
de
seguros
y
los
propios
asegurados.
“Pese
a
que
se
ha
organizado
a
primera
hora
de
la
mañana
de
ayer
martes,
la
sala
estaba
casi
llena”,
indica
Para
García-Romanillos,
presidente
de
la
Fundación
Gómez-Acebo
&
Pombo,
centrada
en
los
temas
de
pro
bono
y
responsabilidad
social
de
la
abogacía,
ha
sido
todo
un
acierto
organizar
este
evento
de
la
abogacía
madrileña:
“donde
queda
claro
la
excelente
respuesta
de
convocatoria
de
los
propios
abogados,
pese
a
ser
Madrid
un
lugar
de
eventos
y
presentaciones
muchas
mesas
de
debate
han
estado
llenas
con
gente
de
pie
escuchando
las
intervenciones
de
los
ponentes.”
Respecto
a la
mesa
sobre
previsión
social
señala
muy
acertado
el
enfoque
y
los
conferenciantes
elegidos
para
analizar
ese
tema.
“Por
desgracia
me
perdí
la
ceremonia
de
apertura
del
evento
aunque
tengo
referencias
que
todas
las
intervenciones
fueron
muy
atinadas”
indica.
Tecnología,
elemento
clave
en
el
evento
Uno
de
los
elementos
clave
de
este
Congreso
ha
sido
la
tecnología.
Además
de
la
citada
mesa
redonda
sobre
mediación
online,
también
se
abordó
la
reforma
de
la
ley
de
propiedad
intelectual
y
aspectos
relacionados
con
Privacidad,
Big
Data
o la
incorporación
de
la
prueba
electrónica
a
los
procesos
judiciales,
entre
otros
temas.
También
entre
los
expositores
Red
Abogacia,
la
entidad
de
certificación
del
CGAE,
tuvo
una
presencia
importante:
“Cada
vez
es
más
normal
que
las
ponencias
tengan
un
componente
tecnológico.
Hablamos
de
un
elemento
trasversal
a
cualquier
rama
del
derecho”,
indica
Francisco
López,
su
director.
Sin
embargo
nuestro
interlocutor
afirma
que
aún
los
abogados
no
son
conscientes
de
lo
importante
que
es
la
tecnología
en
su
gestión
diaria.
“Queremos
que
los
abogados
conozcan
nuestros
servicios
y en
especial
ACA,
Autorización
de
Certificación
de
la
Abogacía,
donde
ya
los
abogados
madrileños
pueden
disfrutar
de
este
servicio”,
resalta.
Dicha
tarjeta,
entre
otras
aplicaciones
ayudará
a
muchos
letrados
a
realizar
su
Declaración
de
la
Renta
este
año.
Los
expertos
en
arbitraje
también
han
tenido
un
hueco
importante
en
este
Congreso.
En
la
comida
de
ayer
tras
finalizar
la
jornada
de
mañana
se
han
hecho
visibles.
Juan
Blanco
de
Stampa
Abogados,
Antonio
Hierro,
Socio
de
Cuatrecasas
Goncalves
Pereira,
junto
con
David
Arias,
socio
de
Arias
Abogados
SLP
o
Seguimundo
Navarro,
socio
de
la
práctica
procesal
de
Crowe
Horwath
y
Francisco
Prol,
socio
de
Prol
&
Asociados
conversan
entre
ellos.
La
próxima
salida
de
Antonio
de
Cuatrecasas
es
uno
de
los
temas
de
conversación
y el
otro
el
laudo
de
Santos
Vijande
del
TSJ
de
Madrid
que
ha
conmocionado
al
sector
del
arbitraje.
En
opinión
de
Juan
Ramón
Montero,
otro
ilustre
del
arbitraje
“esta
práctica
vive
un
momento
muy
bueno.
Nadie
discute
que
nuestra
justicia
es
incapaz
de
asumir
todos
los
asuntos
que
le
llegan”.
Y
compara
el
arbitraje
como
al
uso
de
seguridad
o
medicina
privada
“así
se
puede
visualizar
el
arbitraje
como
práctica
extrajudicial,”
recalca.
En
otro
corrillo
en
la
hora
de
la
comida
de
ayer,
se
habla
de
estrategia
en
los
despachos
de
abogados.
Un
tema
que
fue
expuesto
por
Joaquín
Muñoz,
socio
de
Abanlex
y
Pablo
Romá,
socio
del
despacho
del
mismo
nombre.
En
este
grupo
destacan,
junto
con
Miguel
Angel
Pérez
de
la
Manga,
socio
de
Pérez
Partners
y
moderador
de
la
jornada,
otros
asistentes
a la
misma
como
Emilio
Gude,
de
Ceca
Magán
Abogados,
Borja
Martínez
Echevarria,
socio
de
Miguel
Angél
en
la
citada
consultora;
Carlos
Antón,
de
Diam
Consulting,
Maria
Jesús
Fernández
Espejo,
socia
de
Emprendelaw
y
Fran
Estévez.
En
otro
momento
de
la
conversación
se
incorporan
algunas
personas
del
propio
ICAM.
Tanto
a
Maite
Nadal
como
a
Rosana
Rumchisky,
responsables
del
Comité
Organizador
de
este
Congreso
se
las
ve
algo
cansadas
pero
contentas
con
el
logro
alcanzado:
arrancar
un
evento
tras
400
años
de
historia
de
la
propia
entidad
colegial.
En
este
evento
madrileño
CEAJ
ha
hecho
acto
de
presencia
con
su
nueva
junta
directiva
con
su
nueva
presidenta
Cristina
Llop
a la
cabeza.
Su
presencia
en
Madrid
viene
por
el
lanzamiento
de
Inicia
Abogacía
una
red
social
para
los
jóvenes
abogados
del
país
que
se
va a
gestionar
desde
el
propio
CGAE
a
través
de
diferentes
foros
digitales.
La
propia
asociación
de
jóvenes
abogados
ha
tenido
un
stand
propio
con
mucha
actividad
desde
el
primer
día
“Queremos
que
todos
los
asistentes
sepan
los
proyectos
en
los
que
se
encuentra
inmerso
CEAJ”,
explica
Erika
Ruiz,
también
miembro
de
la
Junta
directiva.
Y es
que
la
vocación
de
esta
asociación
es
la
de
tener
la
visibilidad
que
se
merece
a
través
de
su
presencia
en
los
principales
eventos
de
la
abogacía
institucional.
Para
Carlos
Doñoro
está
claro
que
CEAJ
tiene
que
tener
una
personalidad
propia
y
ser
el
canal
de
las
reivindicaciones
de
la
abogacía
joven.
“Estamos
hablando
de
un
colectivo
superior
a
los
50.000
profesionales,
entre
ejercientes
y no
ejercientes”,
subraya.
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