Antonio Morán, Carlos Carnicer y Victoria Ortega
La presidenta del Consejo General de la Abogacía de España, Victoria Ortega, ha presidido junto al decano del Real e Ilustre Colegio de Abogados de Zaragoza, Antonio Morán, el acto de entrega de la Medalla al Mérito del Colegio de Abogados de Zaragoza a Javier Piera, la Cruz de San Ivo a Mabel Toral y las distinciones a los Colegiados de Honor que cumplen 50 años de ejercicio profesional con un especial homenaje y ovación a Carlos Carnicer.
La presidenta del Consejo General, Victoria Ortega, ha querido reconocer al “maestro, referente, compañero y amigo” que es Carlos Carnicer, destacando el importante papel que ha tenido en la Abogacía al “hacernos entender el ejercicio de lo que somos, de lo que representamos: el derecho de la defensa. Hacernos entender que la defensa es titularidad de la ciudadanía y que era necesaria una ley que la regulara. Tras mucho esfuerzo, el secretario de Estado nos ha confirmado que, en septiembre de este año, irá al Congreso el proyecto de la Ley de Derecho de Defensa”.
Victoria Ortega ha añadido que gracias a ese trabajo que realizó Carlos Carnicer, se sigue luchando por conseguir que “la asistencia letrada sea perceptiva en todos los ámbitos. Que sea perceptiva en casos de violencia de género desde antes de la denuncia o en los procesos en los que están implicadas personas con discapacidad”. La presidenta también ha destacado el carácter visionario, del que fuera presidente del Consejo General de la Abogacía entre 2001 y 2016, al instaurar la firma digital cuando todavía no se hablaba de ella o al insistir en la importancia de la formación continua para los letrados.
Por su parte, el decano del Colegio de Abogados de Zaragoza, Antonio Morán, ha asegurado que Carlos Carnicer “ha sido y lo es todo en la Abogacía”, destacando “la defensa a ultranza que siempre ha hecho de los Derechos Humanos y la convicción de que cada despacho es una oficina de defensa de estos derechos”. Labor que le llevó a crear la Fundación Abogacía Española en defensa y denuncia de la vulnerabilidad de los Derechos Humanos.
Carlos Carnicer, decano del Colegio de Abogados de Zaragoza entre 1991 y 2001, ha sido uno de los trece letrados que han recibido las distinciones de Colegiados de Honor por cumplir 50 años de colegiación. En representación de todos ellos, Miguel Ángel Camarero, se ha dirigido a los asistentes haciendo referencia a que a “todos nos une un hilo conductor, la pertenencia al Colegio” y recordando cómo “adaptación”, ha sido la palabra que ha marcado estas cinco décadas de trabajo con los continuos cambios que se han vivido en la sociedad, incluida la aparición de la Constitución o la entrada en Europa.
En el acto, se ha hecho entrega de la Cruz de San Ivo a la letrada Mª Isabel Toral García, entre otros cargos, ha sido consejera en el primer Consejo de Abogados de Aragón, vicedecana de la Junta de Gobierno del Colegio de Abogados de Zaragoza desde 2014 hasta 2018 y colabora activamente con el Colegio en diferentes Comisiones. El decano del ReICAZ, Antonio Morán ha destacado de Toral su fortaleza y compostura, y ha destacado que, cuando se lo ha propuesto, ha sido capaz de romper techos de cristal gracias a su enorme esfuerzo y dedicación.
La Justicia Gratuita y la Deontología son dos de las áreas en las que ha estado implicada Mabel Toral y que ha querido reflejar en su agradecimiento al recibir la Cruz de San Ivo. Ha tenido también unas palabras para Carlos Carnicer, sobre el que ha dicho que “la Abogacía es hoy lo que es por su generosidad, por la lucha que ha llevado a cabo por defender los derechos de todos. Ha demostrado en estos 50 años ser un gran abogado y una gran persona”.
Javier Piera ha recibido la Medalla al Mérito del Real e Ilustre Colegio de Abogados tras una loa que ha realizado el vicedecano del Real e Ilustre Colegio de Abogados de Zaragoza, Alfredo Sánchez-Rubio, y en la que ha ensalzado el trabajo y el papel que Javier Piera ha realizado en la adaptación del Colegio a todos los cambios tecnológicos en los más de 35 años que ha estado trabajando en la institución. Por su parte, Piera ha recordado su trayectoria desde que el 1 de febrero de 1985 entrara a trabajar en la sede del ReICAZ (situada entonces en el Palacio de los Condes de Aranda, en la actual Audiencia Provicial) y como, de la mano del Consejo General de la Abogacía, consiguieron estar a la vanguardia tecnológica de muchos sectores.
Colegiados de Honor
Los trece letrados que han cumplido 50 años de colegiación y que han recibido la distinción de Colegiados de Honor son: Carlos Carnicer Díez, Carlos Oliván Pardillos, Adolfo Royo Martín, Juan José Herranz Alfaro, Joaquín Gimeno del Busto, Juan Francisco Sáenz de Buruaga y Marco, Miguel Ángel Camarero Charles, José Carlos de Francia Blázquez, Margarita Pomar García, Carlos Cavero Caro, José Ignacio Villellas Aguilón, Pablo Calvo Ruata, Ignacio Martínez Lasierra y Maximiliano Bernad Álvarez de Eulate, colegiado de honor en 2020.
