Smart work, nuevo modelo de trabajo en las empresas españolas

Publicado el miércoles, 13 mayo 2020

La crisis sanitaria va a marcar un cambio importante en nuestra forma de trabajar. En España, el teletrabajo no formaba parte de nuestra cultura empresarial y nos hemos visto obligados a adaptarnos rápidamente, sin planificación, generando riesgos de seguridad tecnológica y cumplimiento normativo.

Marc Gallardo, socio de negocio digital de RSM Spain, comenta: “En España, según datos del INE, solo existía un 4% de profesionales bajo el modelo de teletrabajo y a tiempo parcial, mientras que en Europa el porcentaje se incrementa en un 15% de media”.

Este bajo porcentaje está motivado por la falta de confianza y la sensación de pérdida de control y gobernanza. El coronavirus está cambiando la mentalidad empresarial hacia el teletrabajo y ha llegado para quedarse. Jofre Sans, socio de Setcode y CTO de RSM Spain, habla de un nuevo modelo de teletrabajo denominado smart work, que representa una fusión del teletrabajo y las tecnologías, posibilitando el acceso a todas las herramientas de trabajo desde cualquier lugar con un rendimiento máximo.

Además, Jofre comenta: “En la era de la digitalización es fundamental tener toda la infraestructura gobernada para evitar problemas de seguridad y continuidad de negocio, haciendo un repaso de todos los ámbitos TIC en las empresas para reforzar los aspectos más importantes en el ámbito de la tecnología, seguridad y cumplimiento normativo”.

¿Cómo adaptarse al Smart work de forma segura?

  1. Las comunicaciones son el pilar fundamental del Smart work. En esta forma de trabajar, tener problemas en las comunicaciones nos puede inhabilitar completamente.
  1. Infraestructura corporativa. Es esencial tener una plataforma corporativa para centralizar todas las acciones y políticas IT de una organización. 
  1. Dispositivos móviles empresariales son vitales para tener la capacidad de movilidad y una visión de continuidad del negocio. Existen tecnologías de geolocalización y endpoints, estos últimos son softwares transparentes para el usuario, que pueden ser tan sencillos como un antivirus hasta llegar a soluciones como un DLP con un claro enfoque a la protección de la información evitando fugas no autorizadas. 
  1. Aplicaciones corporativas. Es el momento de poner en juego herramientas de gestión de proyectos y de implementar formas de comunicación más frescas en las relaciones empresa-empleado y empleado-empleado, en una cultura empresarial basada en objetivos y resultados. Jofre Sans, afirma: “Es la era del máximo aprovechamiento de las herramientas digitales, hay que llegar hasta la firma digital para poder cerrar operaciones de forma telemática”.
  1. Monitorización de Usuario y soporte IT. Desde la homogeneización del parque informático hasta la mejora continua en el servicio de atención al usuario es necesario contar con los medios digitales que nos puedan ayudar.

Para implementar el modelo smart work en una organización hay que evaluar cada uno de estos conceptos y determinar el alcance del proyecto, haciendo una evaluación previa de las herramientas más adecuadas, tanto desde un punto de vista técnico como legal, y estableciendo los procedimientos y controles necesarios para la buena gobernanza de este nuevo modelo.

No podemos olvidar la importancia de incluir un anexo en los contratos de trabajo donde se expliquen las recomendaciones básicas para que se realice el smart work de forma segura y eficiente. Depositar la confianza en los trabajadores es un aspecto clave y requiere un “cambio de mentalidad por parte de los empresarios para que funcione y despliegue todas sus ventajas“, comenta Marc Gallardo.

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