Estos días se han sucedido algunas noticias
un tanto sorprendentes que evidencian el
precario estado en el que se encuentra
nuestra Justicia. Entre ellas cabe destacar
el reconocimiento por parte del Ministerio
de Justicia de su ignorancia sobre dónde han
ido a parar los 500 millones de euros
recaudados con las tasas judiciales. Y es
que en el tema de las tasas judiciales todo
pinta a que “hay gato encerrado”.